¿Hemos  errado?

 

Una de las muchas cosas que nos cuesta reconocer son los errores que se comenten en el transcurso de la vida. Es tan difícil aceptar que podemos equivocarnos, que no somos perfectos y que nuestras decisiones no siempre están alineadas con el éxito.​

 

 

Este mensaje pude no gustarle a muchas personas que, al igual que yo en algún tiempo, marchan enrojecidas por el ego, la arrogancia y la prepotencia, cuya percepción de si mismos es de altura y grandeza. Puede que tampoco le guste a quienes defienden la ideología de actuar basados en los impulsos naturales y que estos les llevan a dónde deben estar, sólo es cuestión de equilibrar las conciencias con hacer algunas "buenas obras".

La verdad es que cualquiera que sea tu caso deberás entender, tarde o temprano, que nuestras decisiones traen consigo consecuencias que pueden o no afectar el resto de nuestras vidas, ya sea para bien o para mal. Surge la pregunta entonces ¿cómo estámos de verdad frente a la vida que hemos llevado? Lo más sensato es recurrir al libro Sagrado, La Biblia:

"...por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios..."
Romanos 3:23

Al leer estas palabras nos ubicamos en el lugar correcto para meditar nuestro andar, entonces podemos reflexionar sobre cada detalle y sobre cada circunstancia en la que hemos tomado parte. Quizás has disfrutado una vida en la que has elegido o no preguntar al ser Supremo que te la dio sobre qué decisiones tomar, pueda que no hayas conseguido adoptar la idea de que exista alguien que gobierna por encima de todas las autoridades en el universo y creas que sólo tus habilidades y talentos te llevarán al verdadero éxito.
Lo cierto es que todos, sin excepción, hemos fallado tanto que nos olvidamos de hacer las cosas bien, nos alejamos tanto de la piedad que rechazamos la corrección del Único ser PERFECTO. ¿Podría el ser humano continuar destruyendo, asesinando, pervirtiéndolo todo sin pagar las consecuencias? Hemos destruido el planeta, y ya pensamos en colonizar otro porque este parece tener un tiempo agotado. Hemos destruido vidas con nuestras corrientes filosóficas y nuestras religiones que, aún por hoy, mantienen en guerra naciones. Vendemos nuestros sueños por un poco de dinero, alquilamos nuestro bienestar por la pobreza y el sufrimiento de otros, intercambiamos nuestra comodidad presente por el futuro incierto que tendrán nuestros hijos.

¿Podrá el ser humano continuar creyendo que es es superior, perfecto?

Bien lo dice el apóstol Pablo, inspirado por el Espíritu Santo, a quien no se le escapa nada, ni siquiera la condición de cada persona en el mundo, "todos pecaron", todos hemos pecado, y frente a Dios y el mismo universo hemos fracasado en hacer las cosas correctamente, y la noticia es que no es necesario seguir en la misma realidad. La MEJOR NOTICIA para ti y tu familia, hoy, es que el Dios de amor y verdad, consiente de nuestra condición, planeó nuestra redención, y nos ha provisto de un medio por el cual podemos ser redimidos de ese pecado con que nos alejamos de Él; su hijo Jesucristo pagó el precio que merecemos para darnos una mejor vida "y vida en abundancia".

"...siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús..."
Romanos 3:24

Así es, si estas cansado o cansada de llevar una vida acumulando errores y tristezas, es tiempo de que reconozcas tus pecados a Dios y pedirle perdón, que aceptes el sacrificio que Jesucristo hizo en la Cruz muriendo en tu lugar y, mejor aún, resucitando para que tengas una nueva vida en Él. Jesucristo te ama, y no le importa lo malvado o malvada que hayas sido, lo importante es que hoy le invites a morar en tu corazón.

Entonces una vida de verdadero éxito te espera.

Dios te bendiga.

Hno. Carlos Ruiz